miércoles, 29 de octubre de 2008

Uno y el Otro.


Uno despertó aquella mañana con tiempo suficiente para desayunar. El Otro apenas tuvo tiempo de acomodar su cabellos mientras cepillaba sus dientes.
Uno iba a aprovechar el buen clima para caminar al trabajo. El Otro olvidó extraer dinero del banco, no tendría más alternativa que caminar.
Uno, mientras se despedía de su mascota, miró el almanaque y sonrió. 29 de octubre. Algo le decía que ese no iba a ser un día como cualquiera. El Otro, mientras revolvía su casa buscando las llaves, miró el almanaque. 29 de octubre. Su cumpleaños. Decidió no encender el celular. Odia los días especiales.
Uno se detuvo en aquella esquina a la espera del rojo para cruzar. Desde allí lo divisó. El otro se encontró con esos ojos que lo escudriñaban desde la vereda del frente y sus miradas jugaron a las escondidas un rato. Cruzó la calle.
Uno quiso advertirle, pero el impacto se adelantó...
El Otro yacía sobre el asfalto. Para él, el mundo se volvía puro dolor y tinieblas.
Uno recogía el cuerpo del Otro y lo sostenía entre sus brazos. Para él, el mundo también se volvía puro dolor y tinieblas.
Uno tomó las manos del Otro. El Otro apretó con fuerzas y el mundo ya no fue tinieblas. El dolor se extinguió de pronto.
Uno acarició el rostro del Otro, besó por primera y única vez sus labios y con la mano libre le cerró los ojos.
Allí Uno y Otro se encontraron, se amaron y se perdieron para siempre.
El instante se hizo eterno. Lo eterno duró un instante.
Uno ya no lo olvidaría.
El Otro tampoco.

9 comentarios:

Café (con tostadas) dijo...

cuánta tragedia! muy triste, MUY... pero bellamente relatado

Anónimo dijo...

Dago!!!
Esto es ficción????

El Humanista dijo...

Nene tenés algo hasta para la tragedia que es atrapante. Que manera de contar, de narrar…………..
Uno y el otro en el instante y en la eternidad, chispa de gloria tiempo sin mensurar. Me tocó mucho el relato nene, me gustó mucho y me dejó con algo de tristeza, cuantas cosas no llegan a ser por fortuita tragedia……. En fin, no nos vamos a poner serios que no vale la pena jajajaja


Besote

Sil dijo...

Es muy triste para leer a esta hora de la mañana!

Gonzalo dijo...

Vaya forma de relatar.
Me encantó la frese del final:

"El instante se hizo eterno. Lo eterno duró un instante."

Anónimo dijo...

cuando dos miradas se cruzan creo lo mismo

"El instante se hizo eterno. Lo eterno duró un instante."

Unknown dijo...

Solo rescato la frase que rescatan todos.
Lo demas es mas de lo mismo.
Una persona que escapa de la realidad y se escuda en sus escritos.

Dago dC... dijo...

Javi: Todo bien... Pero, ¿Acaso vos conocés mi realidad?...Que la gente que escribe lo hace para escapar de algo u ocultarse, es un prejuicio, escribo por placer, y aun cuando escribo cosas trágicas lo hago por placer. Muchas gracias por comentar, besos.

Anónimo dijo...

Muy bueno che.